Tiembla,
suspira al mirarme ebria de pasión,
se nutre de mis besos,
cura su sed con el sudor de mis batallas,
gime en mi oido izquierdo
su amor envuelto en llamas.
Me acaricia las mejillas,
con sus labios rosa los mios,
tierna en sus desenfrenos,
victima de mi cariño.
Sobre mi cuerpo desnudo es un torbellino,
un terremoto,
un fuerte oleaje,
un mar que penetra a ritmo de violencia
deseando eternamente en mis noches quedarce.
Vibra insaciable,
mi cama es su selva,
y yo su presa.
Se entrega,
teje en mi piel prohibidas caricias,
se deja sentir
como si el mundo acabara al terminar el día.
sus rodillas no se sostienen,
sus fuerzas estan menguadas,
sin embargo en sus ojos se refleja el pudor,
su chispa anormal y sus excesos de ganas.
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