Veinte segundos sin respirar,
atrapado en las arenas movedizas
de la hipnosis del corazón del alma.
descubriendo con los ojos cerrados
tu fragancia de mujer,
guardada en esta imagen inmóvil.
Buscando en la inercia de este reflejo
el raro por qué de mi existencia.
Te invento mía a pie de locura,
te dibujo en mis parpados
y te guardo en mi mente eternamente
mientras dura mi leve existencia.
Después de veinte segundo
respiros nuevos aires de lujuria,
te contemplo nuevamente con los ojos empapados
de miel, alcohol, y extracto de sentimientos sinceros
y entonces me percato de que la foto esta desnuda, que tu piel esta brillante, y que tu cabello esta alborotado, creo que hicimos el amor mientras estaba soñando, que fui tu dueño sin tu consentimiento, que abrigue tu piel sin que me dieras libertad verdadera. Esto es tan raro, pero así es como mi alma se entrega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario